Cómo combatir el bullying y el cyberbullying

Posted on
Autor: Peter Berry
Fecha De Creación: 19 Agosto 2021
Fecha De Actualización: 1 Mes De Julio 2024
Anonim
Cómo combatir el bullying y el cyberbullying - Conocimiento
Cómo combatir el bullying y el cyberbullying - Conocimiento

Contenido

En este artículo: Protéjase de los acosadores Ayude a otra persona víctima de acoso Acabe con el problema 15 Referencias

La intimidación consiste en comportamientos repetitivos e indeseables que pueden tomar diferentes formas, desde insultos hasta violencia física, propagación de rumores, burlas o escupir. Si bien el término se usa generalmente para referirse a comportamientos en edad escolar, también puede referirse a cualquier táctica agresiva destinada a dañar física, social o verbalmente a alguien que se percibe como más débil que uno mismo.


etapas

Método 1 Protégete de los matones



  1. Determine si esto es realmente un problema. No existe una única forma de intimidación. Puede ser bullying verbal, social o físico. Su punto común es que son prácticas indeseables y repetitivas, a diferencia de un asalto que ocurriría solo una vez.
    • La intimidación verbal puede tomar la forma de burlas, insultos, comentarios inapropiados o bromas de naturaleza sexual, amenazas o burlas.
    • La intimidación social califica los comportamientos diseñados para desacreditar a alguien atacando su reputación o sus relaciones sociales. Esto puede implicar difundir rumores, avergonzar a alguien públicamente o decirle a otros que dejen de hablar con esa persona.
    • La intimidación verbal o social no puede ocurrir en persona, sino a través de las redes sociales, correos electrónicos, SMS o cualquier otra forma de comunicación digital. Esto se llama ciberacoso. El acoso cibernético puede adoptar la forma de amenazas, acoso en línea, amenazas excesivas o la difusión de imágenes o información embarazosa en el espacio digital.
    • La intimidación física ocurre cuando una persona o sus posesiones son atacadas físicamente, ya sea empujando, escupiendo, golpeando o empujando o robando o dañando sus pertenencias personales.
    • Todas estas formas de violencia pueden tener lugar sin ser intimidados. Si una vez ocurre un comportamiento desagradable o violento, como golpear o insultar a alguien, no es técnicamente similar a la intimidación. Si, por el contrario, este comportamiento tiene lugar repetidamente o queda claro que el delincuente tiene la intención de continuar, entonces es realmente una cuestión de intimidación.



  2. Mantenga la calma y pídale a la persona que pare. Mire a la persona que está tratando de intimidarlo y dígale con voz clara y tranquila que detenga este comportamiento inapropiado e irrespetuoso.
    • Si tiene un buen sentido del humor y no tiene miedo, puede intentar hacer retroceder los comentarios o hacer una broma. Una respuesta humorística puede perturbar a alguien que intenta intimidarte.
    • Si la intimidación se lleva a cabo en línea, es mejor no responder en absoluto. Si sabe quién es el responsable y cree que puede confrontarla, espere hasta que esté frente a usted para pedirle que detenga este comportamiento.


  3. Ir. Si no te sientes seguro o no puedes defenderte, vete. Salga de las instalaciones y únase a un lugar donde haya personas en las que confíe y donde se sienta seguro.
    • Si experimenta ciberacoso, cierre la sesión del sitio o deje de responder a los correos electrónicos recibidos. Luego, bloquee el acceso de la mafia a su cuenta o número de teléfono para evitar que lo acosen.



  4. Habla con alguien de confianza. Diríjase a un adulto, un miembro de la familia, un maestro, un colega, alguien de su confianza y explique lo que está sucediendo.
    • Al hablar con alguien, se sentirá menos solo y menos asustado y le ayudará a tomar medidas para poner fin a la intimidación de la que es víctima.
    • Si cree que está en peligro o se siente amenazado, intente hablar con alguien que tenga autoridad sobre el acosador y que pueda actuar en su nombre, como un maestro, su jefe o un oficial de policía.


  5. Encuentre maneras de sentirse seguro, emocional y físicamente. No es tu trabajo defenderte y debes hablar sobre lo que le está sucediendo a alguien en quien confías. Sin embargo, hay pasos que puede tomar usted mismo.
    • Si es posible, evite a la persona que está tratando de intimidarlo o los lugares donde ocurre este acoso.
    • Siempre permanezca rodeado de personas, especialmente si el acoso ocurre cuando está solo.
    • Si es víctima de acoso cibernético, cambie su nombre de usuario y credenciales de Internet, ajuste sus preferencias de privacidad para que solo sus amigos y familiares puedan acceder a sus perfiles en las redes sociales o abrir una nueva cuenta. Haga que la información como su número de teléfono o dirección sea inaccesible y comparta solo la cantidad mínima de información personal. No le des a tu acosador nuevas formas de contactarte.
    • Tenga en cuenta el lugar y el momento de la intimidación y en qué consiste. Si el acosador persiste y tienes que tomar medidas más radicales llamando a alguien con autoridad, es útil llevar un registro de todo lo que te ha hecho. Si es víctima de ciberacoso, conserve todos sus correos electrónicos y correos electrónicos y haga una copia de todo lo que sucede a través de las redes sociales.

Método 2 Ayuda a otra persona víctima



  1. No ignore los hechos y no le diga a la víctima que haga nada. Nunca considere una situación de agresión como algo inofensivo. Si alguien se siente amenazado, entonces la situación debe tomarse en serio, ya sea acoso verbal o amenazas físicas.


  2. Tranquilizar a la persona. Las personas que son víctimas de acoso se sienten impotentes, solas y aisladas. Debes comenzar diciéndole a la víctima que la entiendes y que eres solidaria con ella.
    • Pregunte qué podría ayudar a la persona a sentirse mejor.
    • Dígale que si sufre acoso, no es culpa suya.
    • Ofrecer a la persona que realice un juego de roles en el que jugarás situaciones para ayudarte a lidiar con los delincuentes.


  3. Antes de intervenir, asegúrese de que todos estén a salvo. Si hay un arma involucrada, si se han pronunciado amenazas graves o si se siente inseguro, comuníquese con la policía u otra autoridad antes de tomar medidas.


  4. Si cree que está a salvo, intervenga de inmediato mientras mantiene la calma. Lo mejor es intervenir lo antes posible, antes de que nazca la situación. Si es posible, pida ayuda a alguien que no esté involucrado.
    • Es importante tener en cuenta que algunos grupos tienen más probabilidades de ser intimidados. Es necesario tomar medidas especiales cuando el acoso escolar se refiere a la orientación sexual de una persona joven (LGBT), lo que afecta a una persona con discapacidad o lo que sucede debido a su origen étnico o religión. Encontrará más información sobre estas formas de acoso escolar.


  5. Separar a las personas involucradas. Intente comprender lo que sucedió después de separar a las personas involucradas para poder escucharlas por separado. Al discutir los problemas de intimidación con el culpable frente a la víctima, la víctima puede sentirse desconcertada, asustada o avergonzada.
    • Los opresores a veces intimidan a sus víctimas al amenazarlas con represalias severas si se lo cuentan a alguien. Hablar con personas por separado podría calmar las cosas.


  6. Pide ayuda a la administración de tu escuela. Todas las escuelas tienen reglas de procedimiento que prevén el manejo de los problemas de intimidación. En algunos casos, incluso hay estrategias para el ciberacoso. Depende de la administración de la escuela resolver estos problemas, pero antes que nada, debe ser notificado.


  7. Obtenga ayuda de un psicólogo o terapeuta. Las víctimas de acoso pueden sufrir traumas psicológicos o emocionales a largo plazo. El uso de un profesional ayuda a reducir el impacto de estas lesiones.
    • Desde cierta edad, los niños y adolescentes intentan lidiar con las consecuencias psicológicas que la intimidación puede tener sobre ellos. Esto a veces puede conducir a la depresión o un trastorno de ansiedad.
    • Cuando un preadolescente o adolescente es autónomo o muestra signos de depresión o ansiedad, como un cambio repentino en el rendimiento escolar, la calidad del sueño, la alimentación o una negativa repentina a participar en actividades grupo, es crucial buscar ayuda de un profesional. Haga una cita con el trabajador social o el psicólogo escolar en la escuela de su hijo u otro profesional de la salud.


  8. Nunca aconseje a una víctima de acoso escolar que se defienda solo. La intimidación crea una impresión (a veces real y otras simplemente sentida) de desequilibrio de fuerzas. Puede ser alguien más fuerte que otros, un grupo de personas que se enfrentan a una víctima aislada, una persona con un estatus social más alto que su víctima, y ​​así sucesivamente. Intentar defenderse solo puede hacer que la víctima sienta que es su culpa si no puede salir, o puede exponerla a peligros adicionales.

Método 3 Terminar el problema



  1. Esté atento a los signos de intimidación. Hay una serie de signos que sugieren que alguien está siendo intimidado o, por el contrario, culpable de ello. Tener miedo de estos signos le permitirá identificar rápidamente el acoso escolar para una intervención temprana.
    • Los signos de una persona que está siendo intimidada incluyen:
      • lesiones o contusiones que una persona no puede o no explicará,
      • objetos personales perdidos, robados o dañados, como ropa rasgada, un teléfono que desaparece o vidrios rotos,
      • un cambio repentino de gusto por ciertas actividades o la necesidad de evitar ciertas personas o lugares,
      • un cambio repentino en el apetito, autoestima, sueño o cualquier otro cambio significativo, físico o emocional,
      • depresión, comportamiento autodestructivo, discurso agresivo hacia uno mismo u otros, etc. Si usted o alguien más está en peligro o suicida, busque ayuda de inmediato. Más información aquí.
    • Entre los signos de que una persona es culpable de intimidación, encontramos:
      • alguien que se vuelve más y más agresivo, física y verbalmente,
      • disputas o peleas que se vuelven cada vez más frecuentes,
      • Asistir a otras personas culpables de intimidación,
      • tenerlo frecuentemente con problemas con figuras de autoridad,
      • ser incapaz de reconocer la responsabilidad y siempre culpar a otros por sus problemas.
    • Si nota alguno de estos signos, mantenga una conversación con la persona en cuestión. Al decirle a todos que la intimidación es inaceptable y que usted está allí para ayudar a las víctimas, puede darle a uno de ellos el valor para hablar.


  2. Ser capaz de reconocer a las personas con mayor riesgo de ser intimidadas. Algunos grupos tienen más probabilidades de ser intimidados que otros. Es importante observar especialmente a estas personas.
    • Jóvenes lesbianas, gays, bisexuales y transgénero (LGBT).
    • Jóvenes con discapacidad.
    • Jóvenes que necesitan cuidados especiales, ya sean físicos o psicológicos.
    • Algunas personas pueden ser víctimas de intimidación debido a su origen étnico o religión.
    • Se necesitan medidas específicas para abordar los problemas de intimidación relacionados con la orientación sexual, el origen étnico, la religión o la discapacidad de la víctima. Encontrará más información sobre la mejor manera de proceder aquí.


  3. Localice los lugares donde tienen lugar los problemas de intimidación. Los lugares aislados o sin supervisión son particularmente temibles (baños, paradas de autobús, etc.).
    • Haga el esfuerzo de revisar estos lugares de vez en cuando para no dar la impresión a los culpables de que están fuera de cualquier vigilancia.
    • Si usted es un padre adoptivo, familiarícese con las plataformas utilizadas en línea por su hijo. Pídale que lo acepte como "amigo" o "sígalo". "


  4. Habla sobre el fenómeno de la intimidación. Discuta el acoso escolar y cómo solucionarlo en casa, en la escuela, en la oficina, etc. Recuerde a su séquito que este es un comportamiento inaceptable y no es intrascendente.
    • Es más fácil intervenir cuando se puede identificar la intimidación, por lo que es útil hablar de ello antes.
    • Anime a otros a confiar en alguien de su confianza si hay un problema con la persona o si alguien lo presencia.
    • Establezca reglas sobre el uso de la tecnología para mantenerla segura y apropiada. Discuta con sus hijos qué sitios están permitidos y cómo deben usarse las nuevas tecnologías.
    • Establezca un plan para responder a la intimidación sin poner en peligro a usted ni a quienes lo rodean.¿A quién contactar en caso de problemas? ¿Cuál debería ser la primera reacción? ¿Qué debería cambiar dependiendo de dónde ocurra?


  5. Da un buen ejemplo. Compórtate con respeto y amabilidad con todos, incluso cuando es un acosador. Todos verán cómo maneja la situación y pueden dar ejemplo. Responder con agresión solo empeoraría la situación y podría prolongar el círculo vicioso.


  6. Poner en marcha una estrategia comunitaria. Encuentre a otros con este problema en el fondo y discutan estrategias de prevención e intervención juntos.
    • Esté atento a los problemas de acoso y mantenga los ojos abiertos para detectar signos de intimidación en las personas que lo rodean.
    • Verifique las reglas de su escuela o de negocios para detectar el acoso y el acoso y difúndalo a su alrededor.
    • Dígales a los demás qué hacer y a quién recurrir en caso de acoso escolar, y aliente a todos a ser escuchados si son víctimas de este tipo de agresión o si son testigos de ello.